Una pregunta habitual en la consulta es si el gluten bueno o malo, si deberían dejar de consumirlo o si engorda. Esto se debe a que por las redes circula mucha información errónea o malentendida acerca de lo que es el gluten y de cómo forma parte de muchos alimentos que consumimos. Para aclarar los mitos sobre el gluten, en este artículo hablaremos sobre él y veremos si bueno o malo.
Decir ya si el gluten bueno o malo, es un poco extremista, porque lo cierto es que no es ni una cosa ni la otra. Es solo un conjunto de proteínas pequeñas que se encuentran exclusivamente en la harina de los cereales de secano: trigo, cebada y centeno. El gluten no es imprescindible para el ser humano, pues el valor nutricional de las proteínas es de baja calidad biológica. Esto quiere decir que, si dejamos de consumir alimentos con gluten, no notaremos ningún déficit alimentario en nuestro organismo.
En nuestras consultas de nutrición Huesca intentamos aclarar a nuestros pacientes que dejar de consumir gluten no hará que adelgacen o mejoren sus inflamaciones, a menos que sean intolerantes a él. Aquí está la clave, la intolerancia y las alergias serán las que dictaminen su consumo frecuente o esporádico en una dieta.
Mitos sobre si el gluten bueno o malo
Han proliferado muchas creencias acerca de si el gluten bueno o malo, y ninguna o casi ninguna de ellas ha sido fomentada por profesionales. Cuando personajes famosos comentan algo relacionado con comer o dejar de comer gluten, los nutricionistas sabemos que se va a desatar una ola de mitos sobre algún producto.
Dietas gluten free
Existe una creencia muy aferrada en la sociedad de que una dieta gluten free es perfecta para perder peso, pero lo cierto es que no hay relación. Lo único que sí suele ocurrir, y por lo que seguramente este mito se sustenta, es que si se es intolerante al gluten, la dificultad para perder peso será mayor. La clave está en conocerse bien, comer aquello que nos sienta bien y hacer ejercicio.
El gluten no está solo en el pan
Existe una falsa creencia de que solo evitando comer pan o harina de trigo dejaremos de ingerir gluten. Hacer esto lleva a muchos intolerantes a no superar su condición, pues el gluten es una proteína presente en una gran variedad de productos. Por lo tanto, cualquier alimento que contenga en sus ingredientes harinas de estas gramíneas puede contener gluten: fiambres, cacaos, chocolates, cremas, quesos, etc.
Celiaco e intolerante no es lo mismo
No es lo mismo padecer la enfermedad celiaca que ser intolerante al gluten, pero por desgracia esto lo confunden muchas personas. Aunque la sintomatología puede ser parecida, la causa y las consecuencias a la hora de comerlo son diferentes. La celiaquía es una intolerancia permanente por la cual, cuando el gluten entra en contacto con el intestino, provoca inflamaciones de base inmunológica.
Por otro lado, la intolerancia es una reacción gastrointestinal al gluten, pero sin que se vea el organismo afectado de forma inmunológica.
El maíz es mejor que el trigo
Es habitual buscar sustitutivos, y el maíz suele ser un gran aliado para las personas que no pueden o no deben comer alimentos con gluten. Por suerte, cada vez se pueden encontrar harinas de diferentes cereales o legumbres
El problema es que muchos de los alimentos que no contienen gluten llevan otra serie de aditivos para conseguir la textura y la consistencia que aporta el gluten. Por ello, hay que tener cuidado y no lanzarnos a consumir productos sin gluten como si fueran más sanos que los demás.
¿Pan sin gluten en casa?
Hacer pan sin gluten en casa es bastante complicado porque el gluten es un catalizador para la subida, el color y el crecimiento de la masa. Si eres valiente y te vas a lanzar, perfecto; si no, hoy en día podemos encontrar panaderías profesionales que elaboran ya este tipo de panes con resultados muy positivos. Por suerte, si sufres de algún tipo de intolerancia, no tendrás que renunciar a tu pan del desayuno o de la merienda.
Problemas de no comer gluten
Desde nuestra consulta de psiconutrición Huesca, solemos trabajar con nuestros pacientes la problemática que implica eliminar ciertos alimentos de la dieta sin ningún tipo de justificación clínica. Con el gluten y la lactosa pasa algo similar, y es que muchas personas piensan que por eliminarlos de sus dietas estarán más sanos o adelgazarán. Y ninguna de las dos cosas tiene relación: lo único que puede pasar es que se genere una intolerancia por falta de habituación a este tipo de sustancias.
