Las causas por las que se tiene la barriga inflamada pueden ser muchas y muy variadas, pero todas suelen tener algo en común que es la distensión abdominal. Empezamos a anotar esto debido a que los pantalones empiezan a molestarnos durante el transcurso del día, sentimos molestias en el abdomen al terminar algunas comidas, inflamación exageradamente extraña de la zona, etc. El abanico de posibilidades es muy amplio dentro de la sintomatología, pues cada persona lo vive de una forma diferente. Desde nuestra clínica de psiconutrición Huesca Rompiendo Dietas, vamos a tratar este tema:
Motivos que producen hinchazón abdominal
La distensión abdominal es una sensación de hinchazón o inflamación en el abdomen. Puede ser causada por una variedad de factores, como trastornos gastrointestinales, embarazo, menstruación, intolerancias alimentarias o cambios hormonales. Algunos síntomas usuales de distensión abdominal incluyen dolor abdominal, sensación de pesadez, distensión y gases.
En muchas ocasiones puede ser tratada con cambios en la dieta, como evitar alimentos que causan gases o intolerancias alimentarias, o con medicamentos para el dolor o los trastornos gastrointestinales. Si la distensión abdominal es persistente o se acompaña de otros síntomas, es importante hablar con un médico para determinar la causa y obtener un tratamiento adecuado.
Causas digestivas
Cuando se lleva a cabo un cambio de dieta drástico, sea por el motivo que sea, suele tener repercusiones digestivas. En ocasiones, los pacientes que llevan una dieta alta en frutas y verduras notan una digestión más rápida y se sienten más ligeros. Pero en cuento hacen cambios y reducen este consumo e introducen alimentos más procesados, su tránsito cambia.
Es algo normal, el cuerpo tarda en habituarse, por ello si se va a hacer un cambio de dieta para bien es recomendable hacerla poco a poco. Por el contrario, si lo que ocurre es que sales de tu alimentación de manera puntual, no pasa nada, en unos días todo volverá a la normalidad.
Reflujo y acidez
Otra de las causas de padecer reflujo y acidez es tener sobrepeso u obesidad, úlcera, hernia de hiato, etc. Estos problemas afectan al esófago y al estómago, causando daños en la mucosa y a los tejidos blandos.
Estreñimientos y diarreas
El estreñimiento, la diarrea o el exceso de gases produce inflamación en el intestino y por ende, dolores abdominales. En este caso, hacer un cambio, a menor, de alimentación es una de las claves.
Enfermedades digestivas
Existen muchas enfermedades digestivas que producen distensión abdominal y que por desgracia un alto porcentaje de la población padece. Entre las afecciones más habituales se encuentran:
Intestino irritable
Es un trastorno que conlleva dolor abdominal y variaciones del tránsito intestinal. Aparecen por brotes con mayor o menor frecuencia y puede aliviarse acudiendo a consulta de un nutricionista.
Intolerancias
La intolerancia al gluten o a la lactosa produce mucha inflamación en el sistema digestivo, llegando a los vómitos, gases o diarreas si se consumen alimentos que contengan este compuesto.
Si padeces de abdomen inflamado de forma constante, acude a tu médico de cabecera y solicita unas pruebas. Esta es la única forma de poder detectar esta enfermedad y así poder solventarla con la dieta adecuada.
Infecciones
Debido a diferentes infecciones víricas, bacterianas o parasitarias es normal tener distensión abdominal. La flora se ve alterada ya sea por la enfermedad como por el tratamiento, de ahí la necesidad de tratarlo lo antes posible y que no empeore la situación.
Causas musculares
El volumen de la barriga puede aumentar debido a problemas musculares:
- La faja abdominal está floja.
- No se realizan abdominales de forma adecuada.
- Existe rotura de los músculos de la zona
Para trabajar este aspecto es importante llevar a cabo un entrenamiento apropiado y adecuado a nuestras circunstancias y posibilidades. Empezando poco a poco e ir subiendo la intensidad nos ayudará a no lastimarnos y fijar esta zona.
Causas emocionales
Es común que las emociones, especialmente el estrés y la ansiedad, puedan afectar la digestión y provocar síntomas como distensión abdominal. Esto se debe a que pueden afectar el funcionamiento del sistema nervioso autónomo, que controla muchas de las funciones del cuerpo involuntarias, como la digestión. Cuando estamos estresados o ansiosos, nuestro cuerpo libera hormonas como la adrenalina y el cortisol, que afecta a la motilidad y el funcionamiento del tracto gastrointestinal. Esto puede provocar síntomas como hinchazón, gases y dolor abdominal.
Además, cuando estamos estresados o ansiosos, es común que cambiemos nuestra dieta y hábitos alimentarios, lo que también puede contribuir a la distensión abdominal. Por ejemplo, podemos comer más deprisa, tragar aire mientras comemos o tomar menos líquidos, todo lo cual puede contribuir a la hinchazón y al gas.
Es importante tratar el estrés y la ansiedad para aliviar los síntomas de distensión abdominal. Algunas opciones incluyen la meditación, el ejercicio regular y la terapia. Si los síntomas de distensión abdominal son graves o persistentes, es fundamental hablar con un médico para determinar la causa y obtener un tratamiento adecuado.